En la cama [Eros]

Todavía enredados entre las sábanas, descansábamos Adam (¿tendría que llamarle Eros a partir de ahora?) y yo en la cama que había en uno de los apartados del segundo piso. Por alguna razón habíamos vuelto a hacerlo. Culpa mía, podía decirse, pues yo le besé primero, yo le arrastré a la habitación y yo le tiré a la cama; pero él contestó al beso, me siguió a la habitación y me hizo caer detrás de él. Me gustaría saber por qué me seguía... ¿buscaría sólo sexo? ¿Amistad? Esas eran mis intenciones pero ¿y las suyas? ¿Podía el dios del amor acostarse con cualquiera sin sentir algo más? Probablemente no era buena idea preguntárselo... así que me limité a seguir respirando, ya más tranquila, apoyada en su pecho.

Lo había vuelto a hacer y esta vez me estaba arrepintiendo porque sabía lo que estaba significando esto. Significaba que me gustaba un poco,me atraía como era obvio pero también me gustaba su forma de ser por lo que podía ser preocupante. Si tenía que pincharla de alguien podría hacerme daño a mi mismo;por suerte mi mentalidad se había adaptado mucho a lo largo de los años,habian pasado demasiadas cosas...
Decidí no pensar demasiado en ello porque probablemente yo para ella no fuera más que un rollo,un amigo con el que...bueno podía acostarse de vez en cuando y realmente yo no podía obligarla a otra cosa ni podía negarme del todo porque todo esto estaba ocurriendo en parte por mi culpa.
Fui recuperando la respiración poco a poco antes de estirarme un poco y acariciar sus cabellos ahora que su cabeza estaba sobre mi torso. Era guapa y...directa,eso ultimo sin duda.

-Vaya...¿tienes fijación por este sitio?. Hay sitios más...eroticos que un bar

Bromee con una media sonrisa

Sonreí al escuchar su pregunta.

- ¿Es que importa demasiado el lugar?

Nunca me había preocupado por aquella cuestión. Lo "erótico" para mí no lo hacía el sitio, la decoración; sino la actitud de cada persona, las miradas, los gestos, todo lo que llevaba a la atracción. De ahí que, cuando se trataba sólo de sexo, yo prefiriera la técnica de "aquí te pillo..." a la creación de toda una atmósfera sexy o "erótica".

- Soy más de concentrarme en la persona en cuestión, lo que rodee la situación me da igual en ciertos momentos - dije mientras me sentaba en la cama sin preocuparme por tapar mi cuerpo desnudo-. ¿Es que tú tienes preferencias en cuanto al lugar donde tirarte a una chica? ¿Me toca conocer al cupido romanticón? - reí.

Sí,sin duda a ella no le importaba ni hacerlo en un sitio como este ni quedarse desnuda después. Bueno...en parte era logico después de hacerlo eso era lo de menos peor sin embargo...yo era algo más vergonzoso y después de todo si ella sol quería hacerlo no hacia falta ver más. Sonreí ligeramente al escuchar sus razonamientos,eran bastante distintos de los mios de lo que yo pensaba y de lo que en el fondo sentía la gente y que yo sabía;sin embargo sus motivos tenian sentido.

-Soy cupido...siempre soy romántico aunque no lo pueda parecer en un superficie,todo lo que hago es por algo. Bueno...supongo que el romanticismo se esta perdiendo y que ahora es imposible relacionar el sexo con algo que no sea la atracción o el deseo;el romanticismo ha sdesaparecido a la vez que desaparecio la castidad-Dije riendo un poco,y yo tambien era culpable de eso.-Y...sí,tengo algunos lugares o situaciones preferidas

¿Castidad? Eso sí que me hizo reír.

- La castidad no me interesa, creo que ya lo has comprobado - comenté pícara - el romanticismo es diferente, pero no quiero hablar de "amor" aunque esté con el dios de; prefiero hablar de esos lugares o situaciones...

Tenía curiosidad por las preferencias de Adam; al parecer no coincidíamos en aquel punto, me intrigaba el cómo adornaría él las noches de sexo, pasión, o como quisiera llamarlo.

-Soy el dios del amor...no puedo exponer tan facilmente mi vida privada,me podria jugar malas pasadas-Dije riendo un poco-Si quieres saberlo...descubrelo por ti misma,hasta entonces...

Dije soltando una ligera carcajada.Ahi estaba de nuevo mi media sonrisa socarrona,sabía que me odiaría por ello pero no me iba a exponer con tanta facilidad.Eso eran secretos que...no solia revelar normalmente cosas asi porque...bueno habia gente capaz de chantajearte en ocasiones.

-En serio tu no tienes ninguna fantasia romantica o algo asi?

¿Así que no confesaba? Pues menos iba a hacerlo yo. Él ya conocía mis dos mayores secretos: mi condición de semidiosa y mi aventura con Tennant; no iba a contarle nada más hasta que no hablara él también.

- Soy Cheryl Fox, no puedo exponer tan fácilmente mi vida privada - contesté poniendo una vocecilla ridícula, burlándome de él -. ¿Me estás diciendo que tengo que aceptar otro encuentro para conocer hasta dónde llega tu romanticismo? - comencé a acariciar su cuerpo con mi dedo índice, del pecho hasta por debajo del ombligo; sonreí pícara -. ¿No hay manera de que me des una pista?

Enarque una ceja al ver la facilidad con la que se había burlado de mis palabras. Se equivocaba mucho;no era lo mismo que una semidiosa me contara cosas de su intimidad a que lo hiciera un dios y precisamente del amor al que se podia chantajear para conseguir lo que quieres o para...simplemente jugar con los sentimientos de la gente. No creia que ella fuera a chantajearme pero casi siempre que se cuenta algo es imposible que por cualquier motivo incluso por un desliz se enterara mas gente que...puede que si estuvieran dispuestos a hacerlo.

-Ya ya...Cheryl Fox la graaan semidiosa-Bromee-Bueno...puede que sí,pero sin emabrgo yo no le muestro mis...fantasias o mis sentimientos internos a mucha gente,por muchas noches locas que tenga con esa persona;no es tan sencillo.

Dije con una misteriosa sonrisa antes de reir un poco. Estaba seguro de que ahora se pondria ligeramente melosa para tratar de sonsacarme algo.

-No...nada de pistas

- No te pido que me cuentes todo lo que sientes, tus amores o episodios transcendentales de tu vida. Sólo quiero que instruyas a esta libertina en el mundo del romanticismo.

Por alguna razón sabía que era bastante probable que no me contara nada. Por mucho que intentara jugar respondiendo con aquel gesto yo sabía que de esa carita no podía fiarme. Aun así decidí seguir con la tontería un poco más y llevé mi mano a su entrepierna.

- Esa sonrisita me dice que soltarás prenda si sigo haciendo esto... - dije, empezando las caricias.

-En esa frase ya hay como mínimo un fallo. Libertinaje y romanticismo no es que casen muy bien,a menos que las dos personas lo sean y lo acepten y eso...no suele darse mucho-Dije con una media sonrisa riendo un poco-Asi que no se si podre...ayudarte

Sí,me estaba escaqueando pero es que en un principio no tenía intenciones en darle ninguna de esas pistas más que nada porque...puede que cambiase su opinión sobre mi. Sería algo...liberal pero en el fondo era un romántico empedernido que se enamoraba con facilidad y sufría por amor. Y mostrar esos sentimientos...solía traer viejos recuerdos. Entonces comence a sentir su mano apretando mi entrepierna y entonces...comenzó a acariciarlo con fijeza. Un placentero gesto aparecio en mi rostro;me mordí el labio inferior.

-Ooh...eso es trampa,y chantaje

- Qué tontería, a una persona puede gustarle el sexo sin amor y no por eso no ser romántico con quien tiene que serlo; son cosas diferentes. Al menos yo lo veo así... pero soy una zorra más experta en lo primero, probablemente tú tengas más idea de cómo funciona el amor.

Había seguido con las caricias mientras conversábamos y a él no le molestaba demasiado, le gustaba bastante de hecho, o eso entendí cuando se mordió el labio.

- ¿Chantaje? No, chéri... Chantaje sería decirte "no me volveré a acostar contigo si no me cuentas una de tus fantasías"; yo... sólo estoy siendo cariñosa - reí.

-Sí,pero...una persona realmente romantica,un romantico empedernido no se acostaría con nadie a menos que estuviera realmente enamorado de esa persona,a menos que estuviera seguro de querer compartir algo asi. Puedes ser romantico al enamorarte pero si te acuestas con cualquiera asi porque si...no seras el rey del drama

Dije soltando una carcajada. Yo no era el rey del drama pero también habia que tener en cuenta que era un dios que habia pasado por muchas cosas y que mi educacion de por si ya habia sido muy liberal aunque si que pdía ser muy fiel porque el concepto que tenia del amor sobre mi mismo era...distinto. Resoplaba con suavidad ante cada palabra moviendo ligeramente la pelvis al sentir a su mano juguetear.

-Entonces no puedo quejarme.

Definitivamente mis caricias habían conseguido excitarle... pero no había conseguido lo que quería, que confesara alguna de sus fantasías, y encima el tema había derivado a otro...

- Cuántas cosas estoy aprendiendo esta noche. Ahora resulta que el dios del amor no es un romántico empedernido o el rey del drama, porque si no no se habría dejado liar para acostarse con una cualquiera... Yo que pensaba que no habría nadie más romántico que Eros y resulta que de mí sólo quiere sexo...

Me acababa de confesar zorra y lo era; así que cuando tocaba acelerar el movimiento de mis manos para darle más placer cambié de idea y paré. Seguido me crucé de brazos y puse morritos.

- Je suis trés trés desolée...

-Mi madre es la diosa más...promiscua de todo el Olimpo y se supone que también representa al amor. No,los dioses somos muy distintos a los humanos,tenemos otra mentalidad,otra naturaleza y eso nos permite separar los conceptos del amor de los mortales a los de nuestra naturaleza. Además después de todo si que puedo llegar a ser un rey del drama pero no lo puedo mostrar en público,es algo que debo llevar por dentro;a lo largo de los años me he endurecido y puede que por eso me acueste con la gente simplemente por placer peor...no lo hago muy a menudo,no a menos que tenga un autentico lazo,un autentico flechazo con esa persona;yo no soy tan promiscuo al menos no lo he sido a lo largo de los años.

Dije con una media sonrisa antes de soltar una leve carcajada.

-Bueno...¿y quién dice que seas una cualquiera?. Tal vez haya tenido una conexion o lazo contigo que me permitiera hacer algo así,controlo de sentimientos ¿no?.Pero...¿quien sabe si ha sido eso o no?

La sonrisa acabo borrandose totalmente de mi rostro cuando comprobe como las caricias habian desaparecido y con ellos mis esporadicos movimientos pelvicos en todas direcciones.Enarque una ceja.

-Et je suis trés frustré

- Seguro que si... - dije con cierto orgullo.

Imité su sonrisilla, la que tanto odiaba, y me tumbé a su lado. Así que podía existir algún lazo o conexión entre nosotros... cualquiera que conociera esta historia la resumiría en "chico conoce a chica, chica juega con chico, chica y chico se acuestan". Ahora la situación era algo parecido a "dios y semidiosa filosofan sobre el amor y el sexo"; personalmente, me parecía más divertido lo anterior. Hala, no iba a disfrutar sólo él y menos si yo me había quedado sin conseguir lo que quería, de ahí que parara las caricias... si él quería que nuestra conexión se restableciera... bueno, acababa de cederle el turno.

No pude evitar reconocer esa sonrisilla cuando aparecio en su rostro,se estaba vengando de mi por todas esas veces en las que yo le había dedicado esa socarrona y burlona sonrisa. Resople ligeramente porque sabia perfectamente lo que me tocaba;habiamos acabado hablando del amor y eso a ella no le iba ella habia intentado otra cosa y ahora me iba a tocar a mi arreglarlo,me iba a tocar arrastrarme y pasar de ser el receptaculo de sus caricias,del placer que me ofrecia a ser yo el que debia complacerla. Mi mano se deslizo hacia su abdomen lentamente acariciandolo mientras le dedicaba una media sonrisa. Deslice mi mano por el de arriba a abajo.

[color:2f2d=ñightblue]-Estas enfadada?

Pregunte con un inocente tono de niño pequeño

A estas alturas ya no sabía si era un romántico o un liberal pero lo que sí se veía es que conocía a las mujeres y sabía cómo funcionaban las cosas en ciertas ocasiones. Si hubiera sido otro se habría ido enfadado por haberle fastidiado el juego pero él me correspondió con caricias, cumpliendo el papel que le había tocado. Sin embargo, no sonreí al sentir su mano en mi cuerpo; si lo hacía probablemente pararía, como había hecho yo, y no quería que eso pasara.

- No estoy enfadada... - contesté con el mismo tono infantil.

Sabía perfectamente que iba a estar seria durante un buen rato,al menos hasta que estuviera segura de que no iba a parar;lo que ella no sabía era que no pretendía hacerlo por mucho que sonriera. Continue deslizando mi mano hasta acabar separandola con suavidad dirigiendo entonces mis labios sobre su cuello deslizandome por el con suavidad.

-¿No?. Bueno...al final no te he contado nada y me he ganado un favorcillo no?

Bormee con una media sonrisa antes de mordisquear su cuello suavemente

O igual no pretende parar... pensé al sentir sus manos recorriendo mi cuerpo. Cuando sus besos se posaron en mi cuello confirmé que habíamos vuelto a la acción.

- Sería interesante si me contaras algo ahora... - dije susurrando mientras me dejaba hacer tranquila.

Cuando sentí que me mordía en el cuello no pude evitar soltar un gemido.

Sonreí levemente,estaba insistente;parecía bastante interesada en saber cuales eran mis gustos y mis fantasías,no sabía si por conocer un poco más de mi o simplemente porque quería cumplirlas en algun momento.No sabía si responderle aun,tal vez ahora fuera yo el que quisiera jugar un poco.

-No sé...¿por qué o para qué iba a hacerlo?

Dije con una sonrisa pícara atrapando de nuevo sus cuello con suavidad deslizando mis labios ahora por su garganta

- Porque...

Seguía interesada en sus fantasías y la verdad es que el hecho de que me contara alguna mientras lo hacíamos podía ser muy excitante; aunque excitada ya estaba por sus besos, sus mordiscos y sus caricias. Enredé mis dedos en su pelo e hice que acercara su oído a mis labios para contestarle.

- Porque así la próxima vez lo haremos donde a ti te parezca... - ¿cómo había dicho él? - erótico...

Sí,era precisamente lo que me imaginaba pero eso en el fondo me sorprendia un poco. Suponia que si estaba enamorada de Tennant a mi me estaba usando simplemente para distraerse y como método de distracción,pero pensé que sólo sería por hoy,nunca más,que intentaria conseguir que Tennant solo le hiciera caso a ella pero por lo que veía no era así.Tenía en mente repetirlo muchas más veces y eso...me gustaba.
Deslice mis manos por todas las curvas de su cuerpo mientras sentía como sus labios rozaban el lobulo de mi oreja al hablar.

-Ah pero...¿habra más veces?

Dije con una socarrona picardía antes de atrapar sus labios apasionadamente manteniendo mordido su labio inferior.

-Bueno...siempre me ha gustado hacerlo en una piscina o en un jacuzzi,pero...que no fuera en mi casa. Ya sabés el morbo de que te pillen y esas cosas. Pero nunca he tenído una chica que su familia viviera en una casa con esas características. Ahora que si hablamos en términos románticos supongo que sería en un escenario similar: de noche,un camino de velas hacia el jacuzzi,aromas suaves,música de fondo,tranquilidad,agua...

Casi sin quererlo había concertado otro encuentro entre nosotros... Y no me arrepentía, pero con el único con el que "quedaba" para próximas citas era con Tennant; aunque me acostara con muchos más lo hacía si surgía en el momento, nunca era premeditado... Igual mi proposición no había sido tan "sin querer", era evidente que disfrutaba con Adam, ¿por qué no iba a acostarme con él otra vez?

- Encontraremos ese jacuzzi... - sonreí antes de volver a besarle.

La había pillado de emprovisto,por lo que suponía que ni siquiera se había dado cuenta inicialmente de que acababamos de quedar otra vez. Resultaba gracioso pensar como en apenas unas horas ella había dejado de odiarme y ahora solo pensaba en volver a quedar conmigo para...bueno para intimar;eso tenía que significar que tenía que estar haciendo algo bien. ME alegraba además de que se olvidara parcialmente de Tennant,ese tio no era buen trigo y si solo quedaba con él para acostarse juntos...eso también podía hacerlo yo. Deslice mis labios aún más abajo,alejandome de su garganta.

-¿Sí?¿Y dónde?

Sabía dónde había un jacuzzi a mi disposición pero no estaba segura de si quería llevar allí a Adam... nunca llevaba a mis amantes a mi casa. En realidad no era mi casa; yo vivía con mi padre, o mejor dicho, vivía en su casa porque él pasaba demasiado poco por ahí. Era una casa bastante grande, llena de comodidades, con un salón amplio necesario para las fiestas qeu de vez en cuando montaba mi padre, varias habitaciones y, por supuesto, baño con jacuzzi.

Noté que sus besos se alejaban de mi garganta, bajando... esto podía conmigo... No pude evitar hablar.

- En mi casa...